¿Quién no ha sufrido un incidente en su hogar? De repente el día se tuerce porque la vitrocerámica se rompe, sale una gotera en el cuarto de baño, o un fallo eléctrico convierte los alimentos de nuestra nevera en inservibles.
En España, uno de cada cuatro hogares sufre algún siniestro cada año. Cada 12 segundos las goteras provocan algún destrozo en un hogar, cada 26 segundos un cristal se hace añicos y cada 40 se produce algún daño eléctrico. Estos datos refuerzan la importancia de asegurar bien el hogar: los daños son habituales y pueden ser importantes.
Estos son los siniestros más comunes en el hogar.
- Daños por agua
Los daños por agua ocupan con claridad el puesto número 1. La rotura de una tubería o una bañera que se desborda, pueden causar un daño grave en nuestra vivienda, pueden estropear los muebles de madera o de otros materiales, e incluso producir filtraciones a otras viviendas cercanas. Cuando el agua causa daños a los vecinos entra en juego otra cobertura del seguro de hogar, la de responsabilidad civil.
- Rotura de cristales
Otro de los siniestros más habituales es la rotura de cristales (incluidos los cristales de la vitrocerámica) ya sea por fenómenos atmosféricos o por algún tipo de accidente.
- Fenómenos atmosféricos
También son muy comunes los siniestros causados por fenómenos atmosféricos como el viento, la nieve o el pedrisco. Siniestros que han aumentado los últimos años a consecuencia del cambio climático, y que pueden destrozar los suelos, las paredes o los muebles de nuestra vivienda.
- Daños eléctricos
También la electricidad causa numerosos siniestros en nuestro país, y los daños que ocasionan requieren así mismo una reparación inmediata. En la actualidad no podemos vivir ni siquiera unas horas sin electricidad, de ella depende el funcionamiento de electrodomésticos tan fundamentales como la nevera. Además, pueden propiciar un incendio y tener consecuencias muy graves. Los daños eléctricos se han convertido en uno de los siniestros más comunes en los hogares españoles.
- Asistencia
Estos siniestros engloban un amplio espectro, desde problemas que requieran el envío de profesionales al hogar, sea para realizar reformas, reparar electrodomésticos o acometer algún servicio de bricolaje, hasta percances que necesitan de una restauración estética.
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